1976. Suspiria. 1976. Director: Dario Argento.
Suspiria, de Dario Argento, es una obra maestra del cine de terror, del terror con mayúsculas. El film es tan terrorífico que resulta enfermizo y desagradable. Cada plano, cada escena de Suspiria supone un paso más hacia el interior de la desesperación.
Obra maestra del cine enfermizo
Buena parte del cine de Dario Argento es un mero juego visual de colores y luces. La mayor parte de su cine supedita la trama al efectismo, salvando algunos films de sus inicios como El gato de las nueve colas (1971) o El pájaro de las plumas de cristal (1969).
Suspiria (1976) pertenece a ese cine enfermizo de los avernos más profundos del terror.
Se trata de un producto muy sugerente visualmente, pero con grandes cojeras en el argumento, como es también el caso de Inferno (1980) o Phenomena (1984), del mismo director. Sin duda que todas ellas son capaces de generar una atmósfera tan perturbadora como siniestra. Sin embargo, si empezamos a escavar en la historia, nos daremos cuenta que este Argento no es más que una máquina de humo grotesca.
Se trata de un producto muy sugerente visualmente, pero con grandes cojeras en el argumento, como es también el caso de Inferno (1980) o Phenomena (1984), del mismo director. Sin duda que todas ellas son capaces de generar una atmósfera tan perturbadora como siniestra. Sin embargo, si empezamos a escavar en la historia, nos daremos cuenta que este Argento no es más que una máquina de humo grotesca.
Decir que el cine de Argento es enfermizo no es otra cosa que señalar que la única pretensión de sus películas es generar pavor y repulsión, con algo menos de gore que su colega Lucio Fulci, pero con la misma tónica.
No nos engañemos. El cine de terror, desde sus orígenes, nunca fue diseñado para hacer que el espectador saliera con el estómago revuelto, sino que era un divertimento más ligado en cierto modo a la comedia. Ni el Nosferatu (1922) de Murnau, ni El gabinet del Dr. Caligari de Wiene, ni el Dr. Frankenstein (1931) de Jhames Whale, ni Drácula (1931) de Tod Browning, ni El hombre lobo (1941) de Goerge Waggner fueron producciones verdaderas de terror. Se trataba más bien de cine de suspense con algunos elementos de la ciencia ficción.
De hecho, la ligazón entre terror y comedia ha sido una constante a lo largo del cine, sobre todo a en los años 80, con el prototipo de Noche de miedo (1985).
La escuela italiana del terror: giallo
No es muy descabellado decir que la invención del terror auténtico, en tanto género que pretende generarnos un escalofrío en el cuerpo y una sensación auténtica de repulsión, fue cosa de Dario Argento y de la evolución de otro incursores del giallo italiano. Ellos crearon una escuela, al contrario de lo que pasaba en USA con directores independientes como Romero La noche de los muertos vivientes (1968) o Hooper La matanza de Texas (1974).
A partir de la escuela de terror italiana (Fulci, Argento o Michele Soavi, etc.) la cosa ha ido evolucionando en la actualidad hacia engendros cada vez más gore, siendo la saga Saw (2004) el ejemplo perfecto de la escatología terrorífica, con "éxito comercial".
Así pues, este Suspiria (1976) de Dario Argento representa esa desligazón del terror y otros géneros con los cuáles se hibridaba, para confeccionar un producto que su única pretensión es que el espectador lo pase mal.
Todos aquellos que nos gusta el cine con una dimensión de terror debemos reflexionar seriamente si lo que nos gusta es que la película contenga pinceladas de espanto o estamos más por un producto desagradable y vomitivo totalmente concebido como museo de los horrores.
En mi caso, hace ya algunos años que decidí que nunca me encontré cómodo con el cine de terror grotesco, repetitivo y bautizado de muertes de la marca Argento, Fulci, Soavi, Hooper, Romero and company, aunque algunas de sus películas sean salvables.
Prefiero, sin dudarlo, un terror ligado a la comedia. Puesto que nos vamos a introducir en un cine de efectismo y sin grandes pretensiones que mínimo que nos podamos reír un poco.
Ello no evita decir que Suspiria es una obra maestra a la hora de crear una sensación terrorífica en el espectador, gracias a su ambientación barroca y tonalidades rojizas.
Ello no evita decir que Suspiria es una obra maestra a la hora de crear una sensación terrorífica en el espectador, gracias a su ambientación barroca y tonalidades rojizas.
Dado que Suspiria es una película con gran gancho, aprovecho este espacio para recomendar películas de la “teen horror comedy” que considero entretenidas, a la par que sugerentes:
- Amor al primer mordisco (1979)
- Gremlins I (1984),
- Noche de miedo I (1985),
- Transylvania 6-5000 (1985),
- Mordiscos peligrosos (1985),
- House I (1986),
- Terrorífica luna de miel (1986),
- El vampiro adolescente (1987),
- Una pandilla alucinante (1987),
- House II (1987),
- Noche de miedo II (1988),
- El hotel de los fantasmas (1988),
- Bitelchus (1988),
- El regreso de los muertos vivientes II (1988),
- House III (1989)
- Curso de graduación III (1990),
- Zombieland (2009), etc.
- Temas: casas encantadas, academia de baile, enfermedad, asesinatos, brujería.
.(1) Las brujas están donde menos te lo esperaras.
.(2) La realidad puede ser peor que la más extrema de tus pesadillas.
- Puntos positivos: sugerente escenografía.
- Puntos negativos: producción de terror enfermizo.
- Películas similares: todo el cine de la escuela de terror italiana (Argento, Fulci, Soavi).