Saló, o los 120 días de Sodoma

1975. Salò o le 120 giornate di Sodoma. Italia. Director. Pier Paolo Pasolini.

Saló, o los 120 días de Sodoma
Saló, 1975

Una película corrupta

¡Atención: esta crítica ha sido suavizada respecto a la versión anterior! La razón es que estamos ante una película (séptimo arte), algo que permite más licencias, sin olvidar tampoco la trayectoria de su director Pasolini en el cine.

Saló, o los 120 días de Sodoma (1975) es, en mi opinión, una película difícil. A la hora de hace esta crítica se me generan muchas preguntas: ¿cuáles son los límites éticos del cine?  ¿El cine permitiría hacer algo que la vida no permite? ¿Es todo recurso válido para denunciar una realidad? ¿Hasta que punto la denuncia de una sociedad corrupta se justifica con una película tan polémica?

Cine sobre la tortura


La película narra las torturas a las que se someten a varios chicos y chicas que han sido tomados como prisioneros por los señores de una gran mansión. El film consiste en asistir atónitos a las distintas prácticas pedófilas de los secuestradores hacia los adolescentes torturados. El film utiliza pasajes de la obra del Marqués de Sade, con una ambientación de la Italia fascista de la Segunda Guerra Mundial

Saló 1

La película es todo un conjunto de escenas aberrantes. Los pobres muchachos y muchachas del film son sometidos a todo tipo de atrocidades. El solo hecho de rodar estas escenas me genere incertidumbres. ¿Hasta que punto el cine tiene licencia creativa para poder representar cualquier tipo de realidad? ¿Tiene el arte algún límite ético?

Muy desagradable


Saló, o los 120 días de Sodoma es una película a la que no le encuentro ningún sentido, resultándome extremádamente desagradable. Esto le llevó al director a que la obra fuera prohibida en varios países.

No voy a entrar a relatar ninguno de los episodios del film. Quienes tengan interés que lo busquen en Internet, ya que estamos ante una película muy dura, que roza la temática gore.

Saló 2

Escenas cruentas muy explícitas


En mi opinión Pasolini, que es un director con películas muy interesantes, no dio en el clavo. Es cierto que se limitó a adaptar el libro Los 120 días de Sodoma del Marques de Sade. Sin embargo, creo que no era necesario mostrar con detalle todo el conjunto de aberraciones que tiene el libro. Las sugerencias pueden ser más aterradoras que el recurso a las imágenes sensacionalistas.

Es evidente que la película puede ayudar a reflexionar sobre la violencia endémica que arrastra la humanidad, más aún sobre las perversiones de algunos grupos o sectores. Pero, insisto, tratar de llevar a imágenes todas la maquinaria maquiavélica de Sade, en cierto punto, puede llevar a una equiparación con este autor corrupto.

Pasolini, a pesar de todo, es un gran director


En todo caso, Pier Paolo Pasolini tiene en mi opinión obras muy interesantes en su filmografía, entre las que recomendaré tres de ellas, sin todavía comprender muy bien a que jugaba cuando se lanzó a hacer el film que nos ocupa:

- Las mil y una noches (1974)
- Los cuentos de Canterbury (1972)
- El decamerón (1971)

Dedico esta crítica o comentario a los pobres adolescentes que tuvieron que soportar las vejaciones a las que les someten en la ficción.