1979. The shape of thing come. USA. Director: George McCowan.
El mundo que viene es una película que comienza su metraje advirtiéndonos de que las aventuras galácticas de La Guerra de las Galaxias va a ser su mayor inspiración. Y es que no es posible olvidar aquella introducción de la película de George Lucas, que también comenzaba con una parrafada: “hace mucho tiempo, en una galaxia muy lejana…”
Les dejamos con la intro de El mundo que viene:
Estamos en el mañana después de mañana. La tierra ha sido contaminada y devastada por las grandes guerras de los robots y es casi un desierto. El hombre se ha ido a vivir a la luna, colonizado la superficie y ha construido grandes ciudades sobre lo que antes era sólo un páramo. Atreviéndose a penetrar más allá del espacio, se ha lanzado a una era de aventuras y descubrimientos inimaginables, pero la supervivencia de la humanidad depende del continuo suministro de una droga milagrosa llamada Radic-Q2, que sólo se produce en un lejano planeta llamado Delta3. (narrador)
La película que nos ocupa está basada en una novela de D.G. Welles llamada The Shape of Things to Come. A partir de esta novela, el autor escribiría posteriormente la más conocida “Things to Come”, de la que se hizo la película “La vida futura” de 1936, dirigida por William Cameron Menzies.
El éxito de La guerra de las galaxias (1978) había propiciado toda una orda de producciones que venían a sumarse al carro, desde engrendros como la italiana Star Crash (1979) estrenada al año siguiente, a producciones muy sofisticadas como Alien; el octavo pasajero (1979) sólo dos años después. La película que nos ocupa pertenece a la primera tanda.
Estaban tan de moda las aventuras espaciales que hasta James Bond acabó viajando a la luna en el film Moonraker, película que fue la más taquillera ese 1979, año del film que estamos comentando.
El mundo que viene nos cuenta la historia típica de un villano llamado Omus que quiere ser el amo del universo, del que se excluye la Tierra, porque ya quedó devastada por las grandes guerras. Sin embargo, un equipo de salvadores lucharán contra Omus para impedir sus planes. Estos son el científico Caball y su hijo Jason, junto a la hija del Senador llamada Kim, y un robot del estilo R2D2 de nombre Sparks.
La novedad de la película es que los seres humanos ahora viven en la luna, donde han construido otra nueva civilización, debido a la extinción de la vida en la Tierra. El problema es que, para sobrevivir, requieren de un medicamento especial contra la radiación que sólo se encuentra en el planeta Delta III. La primera acción de Omus será cortar el suministro de esta droga, a menos que nuestros protagonistas le permitan que sea el amo del universo.
La verdad es que este género de films de aventuras espaciales es muy seductor, máxime cuando hay quienes ponemos en duda que los seres humanos hayan pisado la luna. Resulta sorprendente la cantidad de series y películas con naves espaciales surcando el espacio como una realidad futura que nunca llega. Ya Meliès nos regaló un Viaje a la luna (1902) a comienzos del siglo pasado, mostrando el interés del cine por conquistar el espacio. La realidad va muchísimo más lenta.
La película El mundo que viene tiene una dirección muy irregular. Sus efectos especiales, aunque a veces es un aspecto no tan importante si el guión es bueno, son bastante pobres. Así la recreación del planeta Delta III se basó en tomas en los desiertos. Por otro lado, las maquetas y los diseños de los robots antagonistas de los que se vale Omus para atacar a los protagonistas los hubiera hecho mejor un niño de ocho años. Hay que añadir una fotografía descuidada y un desarrollo de la trama con series lagunas de montaje y deficiencias a la hora de planificar los momentos de intensidad en el film A esto suma que los personajes no tienen un gran carisma, salvando a Jack Palance como el maléfico Omus.
Y es que el mayor problema de esta propuesta es su bajo presupuesto, algo que reconoció el director, que se vio muy limitado a la hora de poner en escena el guión, tal y como se recoge en el portal de cine Canuxploitation.
Puede decirse que El mundo que viene es la “hermana gemela” de Buck Rogers en el siglo XXV (1979) de Daniel Haller, estrenada en el mismo año. No obstante, aunque ambas parten de guiones muy previsibles y elementales, El mundo que viene es un desastre mayúsculo en cuando al diseño de producción. Es una película que nadie recuerda, salvo algún que otro canadiense que la vio estrenarse en sus salas, de donde es original la producción. Además, el film de Buck Rogers era un producto televisivo destinado a ser el capítulo piloto de una serie, por lo que la comparación con saldo favorable a ésta deja muy mal parado el film de McCowan.
La estrategia de marketing del film, además de surgir al hilo del éxito de La guerra de las galaxias se apoya en el prolífico actor Jack Palance, que tuvo interesantes trabajos en el pasado como El desprecio (1963) de Godard o Atila, rey de los hunos (1954) de Douglas Sirk. Se trata de uno de esos actores con una trayectoria amplia a sus espadas, un premio Óscar al Mejor actor secundario por Cowboys de ciudad (1991) y dos nominaciones a esta estatuilla por Raíces profundas (1953) y por Miedo súbito (1952). Cuando estaba haciendo esta crítica, me quedé sorprendido por la amplia trayectoria de este actor y sus múltiples incursiones en la serie B.
En definitiva, resulta interesante ver El mundo que viene para poder decir luego que La Guerra de las Galaxias es un obra maestra de la ciencia ficción.
- Temas: batallas espaciales, conquistas planetarias, idilio amoroso, viajes interplanetarios, dominio del universo.
- Mensajes:
.(1) El ser humano siempre ansía conquistar todos los territorios (aunque ya no exista la Tierra)
.(2) El mal siempre vence sobre el bien.
- Diálogos y frases de interés:
1)
- Omus: soy Omus, señor de los robots de Delta 3. Quiero hablar con el señor John Caball.
- Caball: sí Omus. Aquí Caball
- Omus: ahhh Doctor. ¿Se acuerda de mí?
- Caball: sí, en efecto. ¿Qué has hecho con Nikky? Quiero hablar con tu superior.
-Omus: ¿mi superior? Ohh… se refiere al antiguo gobernador de Delta3. Me temo que Nikky y sus seguidores han huido de la ciudadela. Yo soy el que manda ahora.
- Caball: bien ¿te has enterado de que una de vuestras naves acaba de estrellarse contra Nuevo Washington?
- Omus: desde luego esa era mi intención.
- Smedly: Omus, habla el Senador Smedly del Consejo Lunar. ¿Qué es lo que quiere?
- Omus: he hecho grandes progresos en la tecnología Senador. Puedo enseñarles una manera nueva y más eficiente de vivir en la luna.
- Smedly: eso es muy alentador.
- Caball: Omus, no has contestado la pregunta.
- Omus: ¿desea saber qué es lo que quiero doctor? Su respeto, por supuesto, y su apoyo para mi regreso a la colonia lunar .
- Caball: ¿regreso?¿En calidad de qué?
- Omus: Como comandante supremo de la luna, de la tierra y de todos los puestos espaciales del sistema solar.
- Smedly: eso es completamente imposible:.
- Omus: si esa es su respuesta Senador, van a arrepentirse de ello.
2)
Narrador: ante nosotros está la inmensidad del espacio, lo desconocido donde nos aguardan todas las posibilidades, donde los límites del futuro del hombre sólo existen en su imaginación y su visión de las estrellas.
- Puntos positivos: película basada en una novela de H.G. Welles.
- Puntos negativos: decorados futuristas poco logrados, sobreactuación de Jack Palance, dirección mala, sin ritmo narrativo.
-Películas similares: serie "Star Trek" (1966), “Barbarella” (1967), "La guerra de las galaxias" (1977 y siguientes), Galáctica (1978), "Star Crahs, choque de galaxias" (1978) "Buck Rogers en el siglo XXV" (1979), "Los siete magníficos del espacio" (1980), "Flash Gordon" (1980) serie "V-Invasión extraterrestre" (1983), etc.
