1987. The untouchables. USA. Director: Brian de Palma.
Porque la sociedad necesita de personas de ética inquebrantable
Los intocables de Eliot Ness es la 6º película más vista de 1987, año en que Tres hombres y un biberón, se convertiría en la opción más rentable en la taquilla. Esta crítica se la dedico a aquellos que perseveran para que se haga justicia.
La película es una mezcla entre cine negro, con el subgénero policial, pinceladas del cine judicial y cierta estética de cómic.
Es un cine que no me atrae demasiado ya que se suele abusar de tiroteos, muertes y un predominio de la acción sobre la historia. Sin embargo, en esta ocasión, la propuesta acabó por seducirme gracias a su sentido ético del relato, que no abusa de la violencia, la cual siempre es vista como la gran lacra para la sociedad.
Es un cine que no me atrae demasiado ya que se suele abusar de tiroteos, muertes y un predominio de la acción sobre la historia. Sin embargo, en esta ocasión, la propuesta acabó por seducirme gracias a su sentido ético del relato, que no abusa de la violencia, la cual siempre es vista como la gran lacra para la sociedad.
El film Los intocables de Eliot Ness cuenta las aventuras de un agente federal de Chicago en su lucha contra la mafia de Al Capone y su negocio ilícito del alcohol, en plena Ley Seca de los años 30. Además, la película está basada en un material literario de primera, creado por un guionista reputado en el mundo de Hollywood, como es David Mamet, el cual adaptó el libro de Eliot Ness y Oscar Fraley.
La película es una historia que reflexiona sobre la necesidad que tiene una sociedad de castigar a los malhechores por sus actos delictivos, haciendo valer el imperio de la ley, allí donde ésta es violada.
Es un film con un guión sencillo que nos muestra una clásica historia de buenos contra malos, donde el agente federal Ness (Kevin Costner) representa la figura del héroe y Al Capone (Robert De Niro) lo hace del malvado de la historia. Sin embargo, a pesar de su planteamiento elemental, la película va ganando en intensidad dramática a medida que avanza la trama, la cual termina en un juicio excelso contra Al Capone, algo muy hollywoodiense.
La película Los intocables de Eliot Ness consigue que te impliques con la cruzada que Eliot Ness ha puesto en marcha contra el crimen organizado. Logra, que como ciudadano de bien, sientas que toda injusticia tiene unos límites y que hay ocasiones en que, aunque todo vaya en contra de la legalidad, se hace necesaria una apuesta decidida contra el mal. El film logra remover las conciencias de los espectadores, apelando a la búsqueda del sentido ético de la vida, que siempre debería prevalecer por encima de matarifes y mafiosos de la peor calaña.
Los intocables de Eliot Ness es, además, una de mis películas favoritas de la historia del cine. La he visto en muchas ocasiones y nunca me canso de verla otra vez. Logra erizate los pelos cuando el protagonista hace jurar que el crimen no quedará impune, o cuando Jim Malone, agente de Ness, muere en una redada criminal, no sin antes enviar una pista al protagonista para ayudarle en su lucha contra Al Capone.
Sean Connery, fue reconocido con el Óscar al Mejor Actor Secundario por el personaje de Jim Malone, cuya presencia en pantalla se come la del protagonista por momentos. Malone, un policía de la vieja escuela, retirado a un puesto de menor importancia, será la clave para que Eliot Ness termine de convencerse de la importancia de acabar contra los enemigos de la ley, pero a la vez de comprender que el camino va a estar plagado de sangre y lágrimas, aunque merezca la pena.
Y es que la película es un ejemplo de cine ético, de la prevalencia del civismo ciudadano y de los personajes de ley, frente a los corruptores del sistema social. "Los intocables" ofrece un gran mensaje a favor de no caer en el derrotismo de las causas perdidas y pensar que el mundo que vivimos siempre podría ser mejor.
Los intocables de Eliot Ness se presenta, además, como un relato épico, en el que un puñado de hombres de ley deciden hacer frente a toda una maquinaría del crimen y la corrupción que asola las calles de Chicago. La música de Ennio Morricone contribuye a tejer esa atmósfera de grandeza, que caracteriza a la misión que se auto-asigna el protagonista, como valedor de orden social. Kevin Costner eleva a Eliot Ness a un personaje de antología, como lo hará años después interpretando al fiscal Jim Garrison en JFK: caso abierto. (1991).
Mencionar también que la película tiene un aire a cómic, alejándose de las producciones de cine negro clásicas y acercándose a productos como Dick Tracy (1990) o Sin City (2005), entre otros. El diseño de producción de la película, cercano al mundo del tebeo, le ha granjeado no pocos detractores, que no encuentran suficiente verismo en la trama. En mi opinión, esta opción no resulta demasiado negativa. Es cierto que la película puede acabar asimilándose a un relato de ciencia ficción como "Batman" (1989), pero eso no le resta eficacia a una historia que está narrada con gran artesanía y un gran cuidado de los detalles de ambientación, fotografía e iluminación. Por algo se dice que Brian de Palma es el perfecto discípulo de Alfred Hitchcock.
En definitiva, Los intocables de Eliot Ness es, a mi parecer, una de las mejores películas de la historia del cine en su propuesta de fusión de cine negro/policial/judicial y cierta estética de cómic. Aunque su relato es sencillo y con cierto efectismo, su ejecución artístico-técnica es más que excelente, lo que hace que su visión sea una visita obligada para los amantes del celuloide.
- Puntos positivos: gran ejecución artístico-técnica, sobresaliendo actuación de Sean Connery; soberbia música de Ennio Morricone; excelente planteamiento ético.
- Puntos negativos: cierto efectismo.
- Película favorita de: Félix Redondo (autor-blog).
- Trailer:
- Película favorita de: Félix Redondo (autor-blog).
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