1948. Red River. USA. Director: Howard Hawks.
Una gran obra... sino fuera por el trasfondo imperialista
Río rojo es un western antológico con John Wayne y Montgomery Clift, sobre las dificultades de las empresas del hombre blanco, para llevar a cabo su expansión colonial, librándose del "estorbo" de los mal llamado indios.
El film aborda el traslado de mil cabezas de ganado de Texas a Massouri, por parte de un padre y de su hijo adoptivo, interpretados por unos excelentes John Wayne y Montgomery Clift.
Mexicanos e indios como enemigos
No es de alabar la expansión de los anglófonos por las tierras de América, como tampoco nadie aprueba la llamada conquista de América por españoles y portugueses. Sin embargo, la matanza y conformación de los EE.UU se nos presenta en Río rojo bajo una épica legendaria que es cansina. Los mexicanos y los indios que todavía vivían son presentados como enemigos de la civilización, identificada esta última con el revolver que empuña el vaquero.
Es indudable que Hawks es un maestro de la cámara y en Río rojo no escatima su buen hacer. Tenemos la suerte, además, de contar con un especialista de la comedia, que hace que su incursión en el género western tenga un rostro muy amable y entrañable.
Viaje con ganado
La historia de Río rojo aborda el traslado de un ganado de vacas a lo largo del Oeste, mostrándose como una de las narraciones más atractivas del western. Como todo viaje a lo inexplorado la incertidumbre juega un papel importante en el desarrollo de la trama, consiguiendo mantener la atención e intriga en el espectador. El llamado género "road movie" de viaje a través, bebe indudablemente de las travesías del western, salvando las distancias del asfalto y los coches.
John Wayne, Montgomery Clift y Walter Brennan
Por otro lado, el maestro Hawks se rodeó de un reparto envidiable, del que nos ofreció su lado más humano. Ver a John Wayne sonreír y hasta tener una vena cómica no era algo que nos ofreciera muy a menudo John Ford, el director con quién más trabajó. El resto del reparto hace un trabajo excelente. Montogmery Clift o Walter Brennan son, además, cartas de éxito seguro.
Paradójicamente, la película está rodada por uno de los grandes artífices de la screwball comedy o comedia de enredos, autor de obras maestras como La fiera de mi niña (1938) o Luna nueva. Las incursiones en el westerns de este director no fueron menores.
Buena película, sino fuera por su "Historia", con mayúsculas
Así pues, la épica del Río rojo de Hawks resulta notable si no fuera por el transfondo imperialista que esconde. El indio y el mexicano no son el peligro como pretende hacernos creer Hawks, sino el vaquero anglófono solitario que pretende cautivarnos
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Dedico esta crítica o comentario a los desgraciados aborígenes norte-americanos, que a diferencia de los sur-americanos (donde hubo mayor mezcolanza euro-americana), fueron víctimas de uno de los grandes exterminios de la historia de la humanidad.
- Puntos positivos: gran dirección, puesta en escena e interpretaciones.
- Puntos negativos: trasfondo imperialista.