El musical hippy por antonomasia
Hablar de Hair (1979), de Milos Forman, es hablar del cine hippy, del cine de pelos largos, ropa grande y desaliñada, vida al aire libre, en compañía de los demás, practicando el amor libre y la solidaridad. ¿Quién ofrece más?
La película es un musical que trata de tocar cuestiones espinosas como la Guerra del Vietnam, que fue el principal detonante del movimiento hippy, como parte de la contestación de la juventud ante tanta masacre.
El film nos cuenta como un joven pueblerino se traslada a la ciudad para hacer el servicio militar. Sin embargo, allí encontrará con el floreciente movimiento hippy, en el cuál se insertará, para rebelarse contra la sociedad militarizada.
Un aire fresco en el cine
La película tiene un gran ritmo, que te contagia y anima a bailar. Las actuaciones musicales están muy logradas, haciendo que las dos horas que dura la película no se hagan pesadas, para nada.
La localización en el Central Park de Nueva York es muy estimulante. Una escena que siempre se recuerda es la del protagonista bailando encima de una mesa con invitados de clase social alta, poniendo de manifiesto las diferencias ideológicas.
Milos Forman
Hair es un film dirigido por Milos Forman, un director comprometido con las minorías y los márgenes de la sociedad, como ya se viera en su magnífica obra Alguien voló sobre el nido del cuco (1975) o El escándalo de Larry Flynt (1996).
Todos podemos ser hippys por un día
Por un día, todos podemos ser hippys y salir al mundo abandonando los prejuicios sociales y morales, para acercarnos como nunca a las personas en un acto de fraternidad. Con Hair todos podemos volvernos a sentir parte de esta sociedad humana global, que por desgracia cada vez está más atomizada, alienada y manipulada.